Juan Ramón Ascencio Villanueva y Leopoldo Navarro son los responsables de “Los Sancrispines”, la recopilación de historias de los galardonados.
El libro arranca con la historia de Antonio Sánchez Herrera, ganador al “San Crispín” en 1975 hasta Rafael León Meléndez, galardonado en 2021.
Juan Ramón Ascencio Villanueva, uno de los autores, recordó cómo comenzó a involucrarse en los premios.
“Tengo un borroso recuerdo, del sitio en el cuál estaban sentados los primeros ganadores del San Crispín, con el gobernador Ducoing; alguien me localizó y me dijo: que pases a leer las reseñas de los ganadores y sin más, así lo hice, era el año de 1975. Para los eventos siguientes, ahora sí me avisaron con anticipación y pude entrevistar a cada uno de ellos, personalmente, para hacer la reseña. Me impresionó mucho su personalidad y solo los escuché tomando notas, algunos me ayudaron con un escrito previo, pero poco a poco agarré confianza y en los años siguientes, además de las preguntas, me dieron permiso de ir plasmando en la relación de sus vidas, las experiencias mas conmovedoras”.
Ascencio recordó que los primeros escritos eran muy formales y con el tiempo, fue poniéndole el toque personal desde la entrevista, para que en la reseña, estuvieran las palabras de los premiados.
Incluso, recordó una de las historias que comenzó con un fracaso, la de Jesús Vázquez.
“Los Sancrispines” es una recopilación realizada por la Editorial Tlacuilo y está a la venta en el módulo de registro de SAPICA, así como en las instalaciones de CICEG.
Sobre el San Crispín
El “San Crispín” es un trofeo que se entrega a aquellos dueños de fábricas de calzado o marroquinería que han trascendido en la industria y que cuentan con un perfil especial, es decir, que cumplen con algunos requisitos.
Para ser postulado, debe cumplir con requisitos a nivel personal, empresarial y social, entre los que se encuentran:
- Contar con calidad mora, ética y honestidad
- Participar en Consejos del sector
- Se compromete con las causas sociales
- Fomenta el crecimiento de su empresa y empleados
- Cuenta con una excelente relación y reputación con la cadena productiva
- Apoya causas filantrópicas
- Implementa en su empresa prácticas sustentables, energías limpias, etc.
Al premio del “San Crispín de Oro”, le acompaña “La charola de plata”, premio que se otorga a los proveedores, instituciones, etc. Es decir, a alguien con trayectoria en la industria del calzado y que brinde aportes para la misma.
¿Quiénes designan el San Crispín?
El premio lo designa el Comité de San Crispín, conformado por ex presidentes de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato (CICEG) y de sus homólogos de APIMEX y CICUR.
Hay quórum con cinco personas.
El proceso comienza con el envío de la convocatoria a los agremiados CICEG; se envía tres veces por si en la primera o segunda se les pierde el correo; comienzan a escribir a sus nominados y el comité empieza con la deliberación.
Después de algunas sesiones de comité, los involucrados emiten su voto libre y secreto.
La votación se realiza durante el mes de marzo y en mayo, en la toma de protesta del Consejo Directivo CICEG, se anuncian a los ganadores.
Petra Rodríguez, la única mujer “San Crispín”
En toda la historia de los “Sancrispines”, hasta el 2021, sólo una mujer ha subido al podio, Petra Rodríguez.
Petra es la única mujer en el registro de “Los Sancrispines”, quien en la fotografía del recuerdo sale con su marido, Delfino Muñoz, galardonado en 1995.
La anécdota cuenta que Delfino Muñoz subió por su trofeo y pidió que su esposa, Petra Rodríguez, le acompañara, agradeciendo con este gesto, la unión e impulso que recibió para logra el éxito empresarial, más allá del discurso.